¿Queréis descubrir los rincones secretos de Hamburgo? Si ya conocéis lo imprescindible de la ciudad, acompáñadnos para conocer esos otros lugares que pasan desapercibidos para la mayoría de visitantes.
Tuvimos la oportunidad de vivir varios meses en esta ciudad alemana. Queremos enseñaros esos sitios desconocidos que no habríamos descubierto si no fuera porque nos los enseñó la gente de allí.
Ya habréis tenido la oportunidad de conocer los lugares más icónicos de la ciudad, como la zona de canales de Speicherstadt, el barrio de Sankt Pauli o la Filarmónica del Elba.
Pero… ¿y si te hablamos de un edificio cultural alternativo rodeado de las sedes de multinacionales? ¿o de una mezquita color turquesa junto al lago Alster? ¿o de un bunker reconvertido en discoteca?
En esta entrada queremos enseñaros estos y otros muchos rincones secretos de Hamburgo que la mayoría de visitantes no llegan a ver.
1. Espacio sociocultural de Gängeviertel
Hamburgo debe gran parte de su fama a su parte más alternativa. Seguro que ya conocéis el barrio de Sankt Pauli, pero muy pocos visitantes llegan a conocer el espacio sociocultural de Gängeviertel.
Ubicado en el barrio de Neustadt, se trata de un complejo formado por varios edificios. Entre ellos, hay espacios al aire libre repletos de muestras de creatividad y arte urbano.

Sorprende encontrar un lugar como Gängeviertel entre las sedes de algunas multinacionales como Google, que se encuentra a menos de 5 minutos andando.

El corazón de este espacio es el edificio conocido como Fabrique. Se trata de un centro sociocultural de 5 plantas en el que podéis disfrutar de conciertos y exposiciones, asistir a cursos de pintura, a clases de cocina o baile, o incluso a debates políticos.

Los organizadores intentan que todas estas actividades sean gratuitas. En una de nuestras visitas al centro asistimos a un concierto en la planta baja. Sólo tuvimos que pagar la voluntad, más lo que consumimos en el bar.
¿Cuál es la historia detrás de Gängerviertel?
El origen del espacio sociocultural de Gängeviertel es bastante reciente. En 2009, el Ayuntamiento de Hamburgo decidió vender los edificios de la zona a un inversor que quería modernizar el barrio.
Numerosos activistas ocuparon el complejo a modo de protesta, y la ciudad de Hamburgo acabó recomprando los edificios. En la web del proyecto de ocupación Gängeviertel podéis encontrar más información.
2. Millerntor-Stadion: el campo de fútbol del FC St Pauli
Sankt Pauli da nombre al céntrico y popular barrio de Hamburgo, pero también a su club de fútbol. El FC St Pauli juega en la Segunda Divisón alemana, pero no es precisamente conocido por sus éxitos deportivos.
Lo que ha hecho que este club de futbol sea famoso a nivel internacional ha sido su acción social y la calavera que forma parte de su escudo: la Jolly Roger (la reconoceréis por ser la que aparece en las banderas piratas).

Ver un partido en el Millerntor es una experiencia muy especial. El ambiente durante, antes y después del partido es único, por lo que lo recomendamos tanto si os gusta el fútbol como si no.
Además, es muy barato. Con carné de estudiante nos costó 9,50 euros cada entrada. Eso sí, eran en el fondo y para ver el partido de pie. Si preferís sentados, es algo más caro, pero para disfrutar al máximo de la experiencia os recomendamos que lo veáis de pie.
3. El Centro Islámico: uno de los rincones secretos de Hamburgo
Una de las atracciones turísticas principales de Hamburgo es el Lago Alster. Si lo rodéais dando un paseo, podréis disfrutar de sus zonas verdes e incluso ver alguna mansión de lujo con salida directa al lago.
En la parte noroeste del Alster se encuentra otro de nuestros rincones secretos de Hamburgo. Nos referimos al Centro Islámico de Hamburgo y es una de las mezquitas más antiguas de Alemania y de Europa.

Este lugar llama la atención por el bonito color turquesa de su fachada. En su interior veréis alguna exposición y coincidiréis con practicantes rezando en su amplia alfombra redonda. Entrar es gratis.

Podéis encontrar información actualizada sobre los eventos, horarios, historia o servicios que ofrecen en su página web.
4. El bar StrandPauli
Al lado del muelle de Landungsbrücken se encuentra el bar más original de Hamburgo: el StrandPauli. Es un bar y restaurante con una parte al aire libre sobre arena de playa, con una especie de estufas de leña repartidas y con una decoración muy original.

Si le sumáis las vistas al río Elba y una agradable música de fondo, es el lugar perfecto para relajarse y disfrutar de una cerveza después de recorrer Hamburgo.
5. El barrio alternativo de Sternschanze
El barrio más conocido de Hamburgo por su ambiente y arte urbano es Sankt Pauli. Pero pocos turistas llegan a descubrir el que verdaderamente es el barrio más alternativo, reivindicativo y joven de Hamburgo: Sternschanze.
Sus calles están repletas de murales y bares y tiendas originales. Durante los meses que estuvimos en Hamburgo, este barrio era nuestro favorito. Los lugares más peculiares y que más recomendamos visitar de Sternschanze son:
El Kilimanschanzo: un antiguo búnker convertido en rocódromo
En Sternschanze todo es alternativo, incluidos sus parques. El ejemplo más característico es el parque Flora Park, donde encontraréis desde un skatepark a curiosas zonas infantiles que harán que queráis volver a la infancia.
Lo más sorprendente es el búnker de guerra reconvertido en rocódromo y lienzo de arte urbano. Podéis echar un vistazo a su alrededor y, si os acercáis y cogéis algún resto de la pared, veréis las numerosas capas superpuestas como resultado de la cantidad de veces que se ha pintado sobre el muro.
Para poder escalar en este rocódromo, tenéis que ir con alguien que pertenezca a la asociación Kilimanschanzo eV. Aun así, si queréis conocer de primera mano el ambiente alternativo de Hamburgo, os recomendamos que visitéis el Flora Park.
El centro sociocultural Rote Flora
Apenas a unos metros del Flora Park, en la calle Schulterblatt, se encuentra el centro cultural Rote Flora. En su origen era un teatro, pero tuvo diferentes usos a lo largo de su historia hasta que, en 1987, un productor musical quiso comprarlo y reformarlo para que albergara la obra teatral “El fantasma de la Ópera”.
Temerosos de que eso supusiera un aumento en el precio de los alquileres, la gente del barrio organizó varias manifestaciones hasta que, en 1989, el edificio fue ocupado. Así, hasta el día de hoy.
Actualmente, el Rote Flora es el punto de inicio y de organización de numerosas manifestaciones. Por ejemplo, lo fue de muchas de las que tuvieron lugar en julio de 2017 durante la cumbre del G20 celebrada en Hamburgo.
El Rote Flora es principalmente un centro político y cultural en el que se organizan conciertos benéficos, conferencias, reuniones de carácter político... También acoge a personas sin techo y en él se imparten talleres variados: desde reparación de bicicletas hasta de ayuda a personas con problemas de alcoholismo.
Tomar una cerveza en alguno de los originales bares de Sternschanze
El carácter alternativo de Sternschanze se refleja también en sus bares, tiendas y restaurantes. Por algo es el barrio favorito de la gente joven de Hamburgo. Cada uno de estos lugares tiene su particularidad, pero nos gustaría recomendaros algunos:
- El bar Katze, en plena Schulterblattz, en cuya terraza disfrutaréis de un gran ambiente cualquier fin de semana.
- El GoldFischGlas, también con un ambiente muy juvenil y unos precios razonables.
- El Zoe Sofabar, donde podréis tomar algo en sus coquetos sofás vintage.
Si queréis escapar un rato de un ambiente tan alternativo, podéis relajaros sobre el césped del Schanzen Park y contemplar el imponente Schanzenturm, antigua torre de agua que actualmente es un hotel.
6. Feldstraße Bunker: una discoteca en lo alto de un búnker
Cerca del Millerntor-Stadium se encuentra un enorme búnker construido en la Segunda Guerra Mundial: el Feldstraße Bunker. En su interior hay varios tipos de tiendas, pero lo más sorprendente está en su última planta: una discoteca.
Al caer la noche podréis entrar en este imponente búnker y, tras subir varios pisos en un ascensor decorado al estilo hamburgués (lleno de grafitis), llegaréis al club nocturno Uebel und Gefährlich.
Si os gusta el techno, estáis en el lugar y en el país adecuado. Si no es así, os recomendamos que vayáis al menos una noche para vivir la experiencia. No todo el mundo puede decir que ha estado de fiesta en un búnker de la Segunda Guerra Mundial.
7. Campo de concentración de Neuengamme
El último de nuestros rincones secretos de Hamburgo es algo diferente. Se trata del campo de concentración de Neuengamme y se encuentra a las afueras de la ciudad.
En un principio, los prisioneros de este este campo eran presos políticos que se oponían al régimen nazi, pero más tarde pasó a concentrar también a personas de diferentes grupos étnicos. Nos sorprendió que, de entre los presos que pasaron por allí, había muchos españoles. En este folleto tenéis más información sobre la historia del Campo de Neuengamme.
La entrada por libre es gratuita, pero también podéis hacer una visita guiada. Para llegar, tenéis que coger el tren (S-bahn) hasta la estación de Bergedorf y, una vez estéis allí, el autobús 227 o 327. Se tarda alrededor de una hora en llegar desde el centro de Hamburgo.
Hasta aquí nuestra lista con los 7 rincones secretos de Hamburgo que no os podéis perder. Esperamos que os haya gustado y que, si decidís visitar esta preciosa ciudad, los tengáis en cuenta.